Según la primera ley de la termodinámica, "la energía no se crea ni se destruye, solamente se transforma". Esta historia va de eso, de seres que saben como nadie transformar la energía y transmitirla a través de una guitarra. Cada uno a su manera, aprovechando diferentes recursos. Opuestos incluso en su más pura esencia. Pero todos ellos desembocando en el mismo punto y llevando la energía transmitida a su valor máximo.
Desgraciadamente, y como se desarrolla en la segunda ley del código que nos ocupa es imposible que la energía recorra el camino contrario sin sufrir una degradación. Nunca podremos devolver un regalo tan grande. De todas formas, aunque degradada, inútil tal vez, dedicaré toda la energía que me queda para intentar agradecer a estos tres ELEMENTOS el hecho de que tuvieran a bien aceptar la invitación de compartir entre ellos y con nosotros su visión sobre este artefacto que tantas alegrías ha entregado y seguirá entregando a los amantes del rock.
Los Reyes Magos existen, y efectivamente son tres... Esta es la prueba.
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El Rey Lagarto